domingo, 15 de enero de 2017

Poco a poco vamos dejando el cubo de cristal con sus muchas paredes de capaz que nos rodean y cautivan de la felicidad.


porque 


guardemos este secreto por el momento shhh..




https://www.youtube.com/watch?v=Nl4YnPca_fQ&list=FL2NJEZF0R6qPiCs7yhjPipQ&index=14

Shhh...

Hola, aqui humanita rara friki ivonne potterica reportandose con muchos moquitos, bueno, ya no son tantos como ayer :D wiiii creo que estar en cuarentena y pensando tras ver peliculas, ha de ayudar, es que digamos que hahaha bueno, ahi va la idea:

Al final de la película de "Como ser soltera", recordé aquellos tiempos en los que solamente eres tu en búsqueda de tu propia identidad, en esa búsqueda en la que nadie debe intervenir, en la que eres tu quien te ama, donde eres solo tu quien te abraza, quien te proporciona consuelo o dolor en todo momento...  Como olvidar todas esas locuras que se hacian sin que nadie se preocupara por una, como olvidar aquellas crisis solitarias dentro de un cubo, momentos buenos y malos con uno, pero momentos que te forjan en tu personalidad, en tu forma de ser y actuar, vienen siendo momentos que hacen el perímetro de tu persona...

Sin duda, es bueno gozar de esos momentos, sen serio que lo es, pero con el tiempo creo que no me di cuenta de que  aun si eso fuera estando sola, estando con alguien se experimentan mas cosas, emociones, sentimientos, se abre una puerta nueva que en realidad da miedo entrar, han pasado los años y creo a veces ese miedo aun me invade pero estoy clara en que quiero mas no esta claro el como lo quiero, el como lograr llegar a ello, esa es la tarea mas dificil a la que me enfrento a diario.

¿alguna vez han sentido que quieren hacer algo con esa persona especial a la que aman, pero les da pena hacerlo porque no esta dentro de lo que es tu imagen de persona? ¿Haz querido que lea tus pensamientos para lograr juntos las expectativas que tienes de estar juntos?
¿Se han equivocado en el momento en el que solo quieren robarle una sonrisa y terminan distanciándose? ¿Han dicho algo o se han quedado tan callados que terminan pelendose? Siempre es complicado romper las paredes que rodean, quizás no se debía de poner tanta pared alrededor del cubo... ¿como penetrar con aquellas paredes? ¿quizas es una pared de muchas preguntas, de muchos miedos, de inseguridades, de temores, de sueños utopicos, desilusiones, esperanzasas... pero no hemos de perder el caino...

Hace ya 7 años conoci a un chico maravillo, es mi bicho rarito humanito especial, se llama Isaac, aun recuerdo la primera vez que hablamos, el lugar donde nos conocimos, nuestras peleas, nuestro primeros miedos, nuestras risas, nuestras sonrisas, las risas, las lagrimas, las fiestas... ¿es tan dificil creer que todo ha estado ahi para que no dejemos esto? He considerado que es raro durar tanto en una relacion, la mayoria o dura tanto si no va a pasar nada despues como una boda, formar una familia, pero antes de ello se dan por vencidos ¿en donde quedan los te quiero, los te amo, el estare para ti? se que no hemos tenido una relacion de miel sobre el cereal de zucaritas, pero todos esos momentos de luz, de colores brillantes, matices u opacos me han ayudado a seguir amandole. ¿por que èl y no alguien mas? ¿por que alguien diferente a segun el estandar de lo que yo veia? Decir no se, ya no vale porque si se, En èl encontre algo que no pense que conoceria: amor, respeto, apoyo, sinceridad y posibilidad.

Esa posibilidad de buscar nuevos caminos, de no huir, de ver algo nuevo, de tratar de romper los miedos juntos; Me ha apoyado como nadie, de entre todos mis amigos, es el mi numero 1, quizas yo no sepa todo de el, pero el lo sabe de mi, toda la experiencia de prepa la conozco, el apoyo durante la universidad para ambos... ese estar tan cerca y a la vez tan lejos.... el terminar por un tiempo para ver que pasaba con cada uno de nosotros, separarse y cambiar fue dificil, el tratarse complicado pero por aquella amistad y los momentos ¿valia la pena intentar?, claro que si, hasta la pregunta ofendia...

No esta en mi filosofia, despreciar u olvidar a alguien de mi vida, todos han estado ahi y ha sido por algo, quizas unos muy breve y otros por mucho tiempo pero son parte del mundo...
Tras volver me di cuenta de que  la refrescada nos ayudo, sin embargo, el tiempo paso y senti que volvi a retroceder hasta estancar la situacion, ahora ya no era tan sencillo, el se mudo a San miguel, mientras yo seguia donde siempre, casualmente lo veia, casualmente le visitaba, pero era mi mente traicionera ¿por que tanto drama si solo estamos a 1 hr. de distancia?, ¿por que esa actitud si los ultimos años han sido de una relacion a distancia? no me comprendii, a veces sigo sin hacerlo pero creo que el miedo de ver como el vuela y yo sigo aqui, me vueve un poco insegura, porque yo quisiera volar a la par que el... pero creo, aun no es el momento de ello, n se cuando vaya a ser, ¿un mes,un año o en cinco o hasta en 10? no lo sabemos, lo sabremos hasta que sigan los dias...

Muchas nuevas experiencias creo que estan por venir, ya sea para cada uno, o en un 2 x 1 C:  he de recordar todo y hacer que brillemos juntos... Tal vez me arrepiente de que estuve a punto de un año a su lado si me iba a hacer mi servicio en san miguel, pero lo descarte porque para mi,el aun necesita volar solo, y yo lo necesito tambien, no quiere decir que el amor se acabe, mas bien, espero y deseo que esto nos ayude a ver el futuro mas claramente ya sea juntos o como huevos revueltos.
Siempre estare para el, ayer cuando oi su narrativa ilustrativa de su viaje a Dallas, fue sumamente magico, notar como ver su simple sonrisa, su tono de voz tranquilo y a la vez evocando memorias, a mi me lleno de felicidad, ver su rostro al entregar presentes, al verme, me recordo que no debo de ser tan loca de mala forma, ser considerada y disfrutar de esos pequeños pero gigantes pasos que damos ¿o es al reves? ja, sea como sea, el verlo feliz, el estar ahi con el, para mi n hay nada mejor, soy simple ¿tal vez?, timida para decirle que simplezas quiero a su lado, sin dudarlo, se que lo soy, pero de que quiero seguir viendolo crecer, apoyarle, darle la mano, claro que quiero y de que hare lo mejor que pueda para mantener esto, siempre lo hare...

Y de que hare mis mil odiseas y tiempos para visitarle, para viajar, para ahorrar, para divertirme a su lado, no lo dudo porque despues de todo este tiempo, aun me hace sentir las larvas en el estomago haha los mismos piojos en la cabeza.. bueno, hasta mas :B porque es Isaac quien llego a conquistarme, solo soy su trastornada enfermita que espera hacerlo feliz y que siempre lo espera con los brazos abiertos aun cuando a el no le agraden mucho recibir abrazos y contacto fisico, (: Amo a ese chico con su timidez, con sus miedos, su risa oculta, con el brillo de sus ojos presente o ausente, el es para mi el indicado para una lista de aventuras a su lado, espero tambien me vea de esa forma...

Estando cerca o lejos, siento que siemore va a ser correcto ya sea si se trata de demostrar, callar, hablar, lo que sea, el chiste es disfrutar los momentos con quien amas, no desperdiciar ese tiempo en cosas burdas, somos humanos pero el limite ha de ser en lo malo pero ilimitado en todo lo bueno...


No dejemos que nos coman nuestros monstruos.

miércoles, 11 de enero de 2017

No he abandonado, no ando muerta pero quizás si de parranda muy a mi forma, antes de hacerla alguna publicación respecto al fin del año pasado y comienzo de este nuevo, quería recordar y compartir un breve escrito acerca de un libro con un mensaje muy particular que en estos momentos siento que es muy importante...

"Martes con mi viejo profesor."

El libro “Martes con mi viejo profesor”, no solamente narra la historia o lucha de Morrie Schwartz por sobrellevar y seguir viviendo con ELA (esclerosis lateral amiotrófica), esto es a través de la percepción y el recuerdo de su ex alumno y amigo, Mitch (Mitchell), sino que va más allá de eso, debido a que en cada martes, debido a que eran personas de los martes, como decía Morrie, vamos encontrando elementos con los que todo ser humano va a tener que lidiar hasta dejar de existir físicamente, como: el amor, la familia, el dinero, perdón, entre otros hasta llegar a la muerte, por ello, en lo personal considero que más que un libro narrando un recuerdo de un profesor, es una obra que trata de mostrar al lector el diferente significado y/o interpretación de nuestro sentido de la vida.
A veces un maestro no tiene que tener demasiados alumnos a la vez para enseñar algo, puede tener uno solo, y tener efecto en otras personas curiosas que estén interesadas por aprender, ayudándolos a mejorar, y el profesor, digo, entrenador Morrie, lo puede seguir logrando.


Al principio de esta obra, Mitch nos va contando un poco de su historia misma, se podría iniciar que empieza con la imagen de despedida que tuvo con Morrie al graduarse de la Universidad, para posteriormente, recordar y narrarnos su época de estudiante, reflejándonos que durante esa etapa de su vida, Morrie tuvo un gran significado e importancia para él…Más allá de ser solamente su maestro de algunos cursos, fue su entrenador y amigo.
Es curioso, como es que lazos de amistad pese a la distancia y paso del tiempo, pueden pasar al olvido pero al reunirse las personas pareciera que no importara mucho, ya que solo existe en ahora y el momento, aprendiendo del pasado y siguiendo adelante por un prometedor y satisfactorio futuro. No siempre encontramos amigos ni guías así, que a través de sus experiencias y con las nuestras propias, vamos encontrándonos a nosotros mismos en el camino de nuestra historia de vida, quizá con un toque programa de la asignatura del Sentido de la vida, impartida por Morrie. Esta asignatura va tomando forma o comienzo cuando Morrie en compañía de su esposa Charlotte acuden al médico, debido a que estaba presentando dificultad para caminar y él está consciente de que algo andaba mal, fue ese momento en el que le diagnosticaron ELA, en el que partimos a contar lo leído, lo aprendido y resaltando lo que en lo personal, son puntos importantes que quizá fuésemos olvidando pero que están ahí para un fin.
Podemos padecer de alguna enfermedad terminal o no, sentir tristeza, padecer depresión, no verle el sentido al seguir viviendo o tan sencillo como tener alguna dificultad en nuestra vida pero a veces ante cualquiera de los anteriores “motivos” hay ocasiones en lasque podemos preguntarnos el ¿y ahora qué?, podemos variar mucho en quedarnos o en ya no seguir, es como Morrie quizás llego a cuestionarse: ¿Voy a consumirme y a desaparecer, o voy a sacar el mejor partido posible del tiempo que me queda?, él no estaba dispuesto a consumirse, a sentir vergüenza porque fuera a morir , que tuvieran pocas expectativas en cuanto a su tiempo de vida. Por el contrario, haría de la muerte su proyecto final, el centro de sus días, ensayándonos lo que es vivir entre la vida misma y la muerte. Y ¿por qué no aprender con él acerca de eso?

Sólo había que observar, escuchar, comprender y analizar la profundidad de la situación. Es similar a cuando ya hemos perdido a un ser querido, nuestra vida cambia, el tiempo lo vemos como algo valioso, más sin embargo, a veces ese pensamiento solo se vuelve momentáneo y después del duelo, olvidamos lo que era vivir y apreciar el tiempo que tenemos, nos perdemos en el camino.

Si creer que es destino, algún asunto de magia o sencillamente casualidad, pero en esos momentos a veces encontramos algo o a alguien que “nos viene a guiar”, a Mitch le paso cuando tras años de no saber de su antiguo profesor Morrie, lo vio en la televisión proporcionando una entrevista, posteriormente, se dirigió a una visita a Morrie Schwartz. Las reuniones con personas allegadas pero que han estado lejos de uno, pueden ser por años, días, meses u horas, suele influir demasiado en uno, así como, el significado que tenga el vernos de nuevo, todo esto nos provoca un remolino de emociones sin un orden ya determinado, podemos encontrarnos temerosos, ansiosos, emocionados, alegres, tristes, hacemos lo posible para que se dé el vernos lo más pronto o prolongar el momento, como Mitch al llegar a la casa de Morrie pero al final, por voluntad propia sabemos que es lo que queremos y vamos directamente a hacerlo, Mitch salió de su auto, dejo el teléfono y se dio paso para dirigirse a ver a un viejo amigo, en primera estancia, es muy drástica el volver a verse, se siente la estima que existía desde el pasado tras el primer contacto que se dan, es momento de dar por iniciar el curso, en el cual frases tan simples como: «Acepta lo que eres capaz de hacer y lo que no eres capaz de hacer»; «Acepta el pasado como pasado, sin negarlo ni descartarlo»; «Aprende a perdonarte a ti mismo y a perdonar a los demás»; «No des por supuesto que es demasiado tarde para comprometerte», las que se vuelve componentes que influyen en cada una de las clases de los martes entre el entrenador y su jugador.

Morrie, al ser considerado una persona que estaba en el punto medio entre la vida y la muerte, al decir que el morirse no es más que una de las cosas que nos entristecen, al igual que el vivir infelices es otra cosa, ya sea porque la cultura que tenemos no hace que las personas se sientan contentas consigo mismas, o se estén enseñando cosas equivocadas y no se aprenda cómo se deba. Uno tiene que adaptarse a la cultura o a crear una propia; aunque a decir verdad, la mayoría de las personas no son capaces de hacerlo. Al mismo tiempo, nos absorbe una atmosfera oscura, o como suelo llamarla, envuelve la propia burbuja de la soledad de la persona, siendo incomprendida, apartándose de todo aquello que aporta amor, cariño, satisfacción, junto a otras sensaciones positivas que retroalimenten al individuo a seguir en esta vida de tirones, caídas y pasos para adelante o hacia atrás. La ley de los opuestos, explicada por Morrie es un ejemplo de ello: “La vida es una serie de tirones hacia atrás y hacia adelante. Quieres hacer una cosa pero estás obligado hacer otra diferente. Algo te hace daño, pero tú sabes que no debería hacértelo. Das por supuestas ciertas cosas, aunque sabes que no deberías dar nada por supuesto. Es una tensión de opuestos, como una goma elástica estirada. Y la mayoría de nosotros vive en un punto intermedio. »

Es tan cierto el hecho de que: “Son muchas las personas que van por ahí con una vida carente de sentido. Parece que están medio dormidos, aun cuando están ocupados haciendo cosas que les parecen importantes. Esto se debe a que persiguen cosas equivocadas. La manera en que puedes aportar un sentido a tu vida es dedicarte a amar a los demás, dedicarte a la comunidad que te rodea y dedicarte a crear algo que te proporcione un objetivo y un sentido y una de las mayores lecciones es aprender a dar amor y a dejarlo entrar en nuestra vida”, pero aun sabiendo que esto es cierto, no hacemos nada al respecto o quizá no todo lo que de verdad podemos hacer.

Por lo anterior ¿Deberíamos sentir lástima por nosotros mismos si no cumplimos con lo que tenias pensado?, ¿por perder nuestra autonomía?, ¿Por perder un estado optimo de salud? A veces necesitamos desahogarnos y para ello debemos explorar nuestros sentimientos y emociones, ya sea llorando, gritando o de alguna otra manera pero después cada uno debe concentrarse en todas las cosas buenas que me quedan en la vida, esto es un signo de autocompasión. A esto uno viene, el si ¿tenemos que cuidar a los demás, o tenemos que cuidar de nuestro “niño interior”?, ¿Tenemos que volver a los valores tradicionales, o tenemos que rechazar la tradición por inútil?,

¿Tenemos que buscar el éxito, o la sencillez?, ¿Tenemos que simplemente, decir que no o que simplemente, hacerlo?, las respuestas que demos quizá nos provoquen sentir lástima por uno mismo, pero sentirla es de humanos, pero, el dejarnos conquistar por ella, no nos llevara a ningún lado, así mismo, puede aparecer el arrepentimiento por ciertas cosas que no logramos o asuntos incompletos, pero si estos tienen aun se pueden lograr ¿Por qué no darles un tiempo en nuestra vida, hacerlos y gozarlos porque así lo queremos?, ¿Por qué solo recalcarnos ese arrepentimiento y no hacer algo para que este sea menor o vaya desapareciendo o sino que se vaya a otro plano de nuestra vida?

Quizá lo anterior se relacione al hecho de que Morrie, le diera espacio a gente desconocía para él que le enviaban cartas para contarle acerca de su vida y pedirle consejos u opiniones la respecto, y más considerando el hecho de que

Morrie había pasado por diversas situaciones que le hicieron la persona que era ahora, no vivió del pasado pero lo recordó para salir a delante y superarse, aun con su enfermedad él daba algo a su comunidad. En ocasiones le hablaban acerca de la muerte, y un punto muy notable de Morrie es que aunque todos sepamos que vamos a morir, la mayoría no se la cree o no se quiere visualizar en ese aspecto por lo que a veces se cree la idea de ser “inmortal”, aun así, es importante y más significativo, el de saber que te vas a morir y estar preparado en cualquier momento, ya que la muerte no avisa siempre y por eso es mejor tener esa preparación para nosotros y para los demás. Así, puedes llegar a estar verdaderamente más comprometido en tu vida mientras vives. ¿Estoy preparado? ¿Estoy haciendo todo lo que tengo que hacer? ¿Estoy siendo la persona que quiero ser?, preguntas que si bien nos pueden ayudar a encaminarnos en nuestras acciones, también nos recuerdan, de manera tal vez indirecta que, cuando aprendes a morir, aprendes a vivir.

Eso lo vemos cuando valoramos y apreciamos más lo que es esencial para nosotros, lo que es visible a simple vista o que no lo es, cuando apreciamos lo que nos rodea y dejamos de ser personas en un estado robot, en el que dejamos la rutina que nos desquicia y nos hace olvidar la verdadera satisfacción que hay después de realizar un trabajo, cuando rompemos esas cadenas, llegamos en ocasiones a apreciar lo demás como si fuera la primera vez que lo vemos, causándonos emoción y satisfacción, es cuando somos libres para continuar ya sea para seguir viviendo o para aceptar que nuestro tiempo en este espacio terrenal a llegado a su final. Pero ¿qué elemento de la sociedad llega con el individuo al final de su vida? La familia se hace presente, es nuestra base de seguridad, Si no tienes el apoyo, el amor, el cariño y la dedicación que te ofrece una familia, no tienes gran cosa.

El amor tiene una importancia suprema. Esto es parte de lo que es una familia, no es sólo amor, sino también nos hace saber que hay alguien que está velando por uno, nos brinda seguridad espiritual el saber que tu familia estará allí, velando por ti…Nada en el mundo te dará eso ni el dinero ni la fama, solamente la familia. El simple hecho de continuar con los lazos familiares, nos fortalece y nos recuerda que tenemos un hogar al que podemos recurrir cuando lo deseamos.

Es a partir de lo anterior, cuando nos conocemos y quizá decidamos que estamos listos para enfrentarnos a nuestras emociones ¿en qué aspecto? Al desligarse, como dicen los budistas: “No te aferres a las cosas, porque todo es permanente”, pero ¿Cómo explicar eso? Si bien, hemos estado hablando siempre de vivir la vida, de amar y ser amado, aceptar todas nuestras emociones ya sean buenas o malas, ¿cómo puedes hacer eso si estás desligado? Primeramente, como decía Morrie: el desapego no significa que no dejes que la vivencia penetre en ti; al contrario: dejas que penetre en ti plenamente… Así es como eres capaz de dejarla ir cuando es el momento de hacerlo, es decir, sí contienes las emociones, si no te permites a ti mismo llevarlas hasta el final, nunca podrás llegar a estar desligado; estarás demasiado ocupado con tu miedo. Tienes miedo al dolor, tienes miedo a la pérdida de un ser querido. Tienes miedo a la vulnerabilidad que trae aparejado el amor, pero si te dejas llenar de estas emociones, permitiéndote a ti mismo que te invadan tu ser, hasta el final, por encima de tu cabeza incluso, las vives de una manera plena y completa. Sabes lo que es el dolor, lo que es el amor, la pérdida de un ser querido. Y es ahí en donde solamente entonces puedes decir: “Está bien. He vivido esa emoción, reconozco esa emoción y ahora necesito desligarme de esa emoción por un momento”.

Hasta donde hemos hablado han trascurrido seis martes y en este séptimo martes, se hablo acerca del miedo a envejecer, en lo personal, creo que este miedo se debe al hecho de que al ser viejos ya no somos útiles para realizar de algunas de las muchas actividades que hacíamos en nuestra juventud, invade el cansancio, somos más susceptibles a sufrir cambios drásticos en nuestra salud hasta llegar a perderla y como consecuencia parte de nuestra independencia, al llegar a este mundo la mayoría de las personas se entristece hasta llegar a deprimirse, deja de disfrutar las pequeñas cosas, sin embargo, por ejemplo, Morrie, aprendió a disfrutar de la dependencia, quizá al cerrar los ojos y deleitarse de que otros hagan cosas por uno como movernos, darnos de comer, ayuda a figurarnos que nosotros mismos lo estamos haciendo, que la otra persona es solo la extensión de uno mismo, tal vez no en todo lo podamos aplicar pero en las pequeñas cosas podemos hacerlo y eso podría tener un gran cambio en nuestra percepción , en nuestras emociones, en nuestra manera de autocompasión. 

Envejecer es crecer, si hay que cuidarnos pero al mismo tiempo disfrutarlo, si bien a veces deseamos volver a cierta edad o momento de nuestra vida, no creo que sea por una vida insatisfecha como tal, sino porque en ese momento invadió esa sensación de satisfacción y felicidad, lo mejor posible, y en el momento en el que estamos cursando simplemente esa satisfacción y felicidad ya no están; el recuerdo nos ubica para querer volver a sentir aquello, es solo cuestión de darle el sentido apropiado a ese recuerdo para poder continuar viviendo sin estancarnos en él, se trata de aceptar quien eres y gozar de ello. «Tienes que encontrar lo que hay de bueno, de verdadero y de hermoso en tu vida tal como es ahora. Si miras atrás, te vuelves competitivo. Y la edad no es una cuestión de competitividad.»

Si bien, en la vida casi todo es competencia, en esta también hay dos elementos participes que van de la mano, el dinero y el poder, pero ¿de qué manera? El dinero marca un estatus y por ende nos da poder, es decir, es aquel que “te da el recurso para conseguir y lograr algo, como una vivienda, un auto, completar tus estudios, explorar el mundo, etc.”, proporciona placeres materiales a nuestra vida, quizá este sobrevalorado, porque pequeñas placeres como bailar, cantar, dibujar, estar en familia, pueden llenarnos más que el poseer un desborde de dinero en la cuenta del banco, depende mucho de nuestra perspectiva porque es muy cierto el hecho de que las cosas materiales no pueden ser un sustituto del amor, ni de la delicadeza, ni de la ternura, ni del sentimiento de amistad. Pero si bien, tanto el dinero como el poder cuando más los necesitas, ninguno de los dos, te darán el sentimiento que buscas, por mucho que tengas de las dos cosas. ¿Es una batalla entre lo que queremos y lo que necesitamos? A veces solamente debemos aceptar lo que nosotros podemos dar a otros o lo que nosotros de verdad necesitamos, las cosas que queremos no siempre son para lograr una satisfacción, a lo mejor solamente son ideas flotantes que tienen un valor pero de manera momentánea, al final pueden olvidarse, porque no siempre son necesarios solamente nos hacemos creer que lo son.

Si recordamos bien, uno de los elementos que Morrie procura destacar es el amor, además de ser un sentimiento, una sensación que nos invade, es lo que nos hace ser vivos y a la vez, a ser recordados por aquellos seres que nos amaron y nosotros amamos en vida. Como bien sabemos: todo nacimiento debe engendrar una muerte, y toda muerte produce un nuevo nacimiento. Así se conserva completa la energía del mundo, aunque dejen un vació, todos somos criaturas del mismo sitio, somos elementos prestados, que al terminar nuestra labor aquí, debemos ser repuestos.

Además de contar con nuestra familia, si tenemos la fortuna y nos damos la oportunidad, podemos tener a nuestro lado a una persona especial y formar un lazo formalizando con el matrimonio, debido a nuestra cultura, desde mi percepción personal, es crear un contrato de amor. Sin embargo, en ocasiones la mayoría tiene problemas con este, ya sea para entrar o para salir de él, puede que se deba al hecho de que nos estamos volviendo mas egoístas y menos prudentes, será que somos demasiados egoístas para participar en una verdadera relación de amor, o bien preferimos lanzarnos al matrimonio apresuradamente para al final divorciarnos rápidamente , ya que nunca nos dimos a la tarea de saber lo que queremos de un compañero y o de averiguar el quienes somos, así…¿cómo van a sabremos con quién nos hemos casado?

Es triste, porque tener una persona amada es muy importante. Te das cuenta de eso sobre todo cuando estás pasando una época difícil, cuando no estás muy bien. Los amigos son estupendos, te alegran y te apoyan a su manera, pero los amigos no van a estar aquí por la noche cuando no puedes dormir y alguien tiene que pasarse la noche en vela a tu lado, animarte, intentar serte útil, pero si tienes a esa persona amada, ella estará, se volverá tu fuerza, será parte de uno hasta el final. Y algo lindo que se puede aplicar con nuestra pareja de vida, es el primer fragmento de la canción que Janine, esposa de Mitch, interpreto ante Morrie: “Sólo con pensar en ti, me olvido de hacer, las cosas corrientes que todos tienen que hacer...”, es como menciona algún momento Morrie: “¿No oyes a veces mi voz cuando estás en tu casa? o ¿Cuándo estás solo?, si la respuesta es sí, entonces, no me olvidarás cuando me haya ido…con el solo hecho de que pienses en mi voz, yo estaré allí”. Es aquí cuando vemos la influencia o mejor dicho la importancia de los otros en nuestra  vida misma. Aún y cuando nuestras culturas o algunos valores, sean diferentes o similares, así como, las situaciones de nuestra vida, vivamos en donde vivamos, el defecto mayor que tenemos los seres humanos es que somos cortos de vista, no solo ver lo que podríamos ser, aunque deberíamos estar viendo nuestras posibilidades, dando de nosotros el máximo hasta llegar a ser todo lo que podemos, suele no ocurrir por ello, al final hay unos pocos que lo tiene todo y otros que tratan pero no lo logran, quizá porque hemos olvidado que nosotros necesitamos de los demás, así como ellos nos necesitan a nosotros, es parte de formar una comunidad y una familia.

Ya casi llegamos al final, pero no por ello dejan de ser importantes las clases, las últimas son acerca del perdón, del día perfecto y adiós.


Del perdón, ¿Qué debemos saber al respecto?, bueno «antes de morir, perdónate a ti mismo. A continuación, perdona a los demás.» para lograr lo anterior, tenemos que romper algunas trabas, una de ellas es el orgullo cuando se trata de perdonar a los demás, no obstante casi siempre es mas complicado el perdonarnos por todas las cosas que no hicimos, por todas las cosas que deberíamos haber hecho. No podemos quedarnos estancados en el etc., son diversas circunstancias las que pueden darse pero quizás debamos ver que estas son lecciones de aprendizajes en nuestra historia de vida, ¿qué tal si ese rencor a la vida misma es la barrera que nos impide cambiar y disfrutar el vivir? También tenemos que hacer paces con la vida misma, si recordamos que “mientras podamos amarnos los unos a los otros y recordar el sentimiento de amor que hemos tenido, podemos morirnos sin marcharnos del todo nunca. Todo el amor que has creado sigue allí. Todos los recuerdos siguen allí. Sigues viviendo en los corazones que has conmovido y que has nutrido mientras estabas aquí”. No necesitamos tanta perfección ni tanta cosa material, las simplezas de la vida misma, nos proporciona felicidad, por ejemplo: el estar viendo el cielo nocturno con la Luna resplandeciente con un árbol a un lado, puede darnos tranquilidad, si estamos apreciando aquella imagen poética con una persona amada, quizá nuestra pareja, va cobrando algún significado, volviéndose un mágico momento que nos llena de dicha.

Como aquel cuentillo que recuerda Morrie:

»Bueno. El cuento es de una olita que va saltando por el mar y lo pasa muy

bien. Disfruta del viento y del aire libre, hasta que ve que las demás olas que

tiene delante rompen contra la costa.

»Dios mío, esto es terrible —dice la ola—. ¡Mira lo que me va a pasar!;

«Entonces llega otra ola. Ve a la primera ola, que parece afligida, y le dice—.

¿Por qué estás tan triste?

«La primera ola dice: ¿Es que no lo entiendes? ¡Todas vamos a rompernos!

¡Todas las olas vamos a deshacernos! ¿No es terrible?

«La segunda ola dice—. ;No, eres tú la que no lo entiende. Tú no eres una ola;

formas parte del mar.

Al final, llego la hora de partir pero aunque llegue ese momento, para la gente que dejamos una huella, ellos sabrán que aunque dejamos la vida terrenal quizá nos espere algo más, pero no por ello dejamos de ser en definitiva lo que fuimos antes de retirarnos. Morrie en sus últimos días de vida, tuvo lo que a veces la mayoría de las personas no tienen oportunidad: despedirse de la gente importante de nuestras vidas, aunque no sepamos hacerlo apropiadamente, la despedida es un adiós, acompañado de todo aquello que amerite ser expuesto, un te quiero sincero, es dejar volar a la persona y dejarnos volar a nosotros mismos, es partir por separado.

Morrie al final, dio su ultimo respiro, solo en su cama, con sus libros, con toda su familia en su hogar, así como Mitch, también creo que fue apropósito, todos necesitamos un momentos con nosotros mismos, quizás estaba consciente o no de ello pero quiero pensar que la mayoría sabe cuándo es el momento de despedirse de los demás o de hasta quienes sí o no hacerlo, el momento de reconocer que ya es hora de partir, en ocasiones a los familiares nos duele (algunos más que a otros), porque quizá no llegamos a tiempo a despedirnos pero y ¿si antes de partir nuestro ser querido al final sabia que sería más complicado para nosotros el dejarlo ir, sí lo llegábamos a ver? Quizá simplemente quería irse serenamente, en tranquilidad, podemos pensar demasiado al respecto pero entre esos pensamientos nunca demos creer que lo hicieron con el afán de dejarnos con arrepentimientos, porque en sí, las pérdidas son parte del sentido de la vida, vamos aprendiendo de la experiencia, y tanto la vida como la muerte son la enseñanza y aprendizaje lo que continua, aun y cuando ya no estemos aquí, vamos dejando un poco de nosotros en otros, y ese poco es material de aprendizaje para ellos.



“Un maestro afecta a la eternidad; nunca sabe dónde termina su influencia”.

HENRY ADAMS.