domingo, 26 de junio de 2022

Mantén la calma...


Tal vez no es nada o tal vez si es algo o tal vez solo es un susurro del viento, pero me inquietan esos susurros que hacen sacudir la mente.


Acepto mi nivel de afligida, acepto que conozco la situación, reconozco que el salir de mi cueva, despegarme de la capa de indiferencia que abrace o de no darles tanto valor como lo hacia antes para no darle importancia más de la necesaria a las cosas y que estas no me afecten como solían hacerlo, es complicado... tal vez ese es mi concepto de paz, mi nuevo concepto de paz.


Se qué en mi cueva mi paz solo me llega cuando estoy sola, tirada en el piso escuchando música sin pensar o cuando me dejo llevar por los ritmos y brinco, hago un playback  o me suelto a cantar, olvidando lo externo e interno... Solo el fluir sin pensar en lo demás es una paz.

Algunas veces soy bien consciente de aquello que se termino y no se ha vuelto a definir, de aquello que me hirió y que lastimo a más de uno... Del antes, del después y del ahora.... Puede que mi ahora se sienta mejor que el antes pero a veces de las sombras aparecen aquellos fantasmas a susurrar, no me dejo, sacudo mi cabeza de un lado al otro, evadiendo aquello que me gritan detrás de mi oído, más sin embargo, en algunos aspectos conozco mis límites actuales, y en otros no quiero tocar más allá de la superficie que podemos ver. 

Me han dicho que tengo una capa, un escudo enfrente de mí, que no permito a todos acercarse y conocerme de más, que se nota lo afligida que quedé, que el miedo a perder a la Ivonne que siempre ha estado conmigo a veces lo pueden ver, y yo solo quiero que no lo vean, que no digan, que no me sientan...  No hablo con muchos pero mi grupo reducido ya no es tan reducido a veces, se ha ampliado y puede que poco a poco mi vista ya no este tan nublada, ya  no veo tanto al suelo pero tampoco mantengo tanto la mirada en  línea recta. Necesito bajarla, para recordar donde estoy, lo que hay detrás, lo que me jala, lo que se me pesa, lo que me lastima y lo que me sana... necesito recordar lo que fui, lo que soy y dirigirme a algo, no defino quien quiero ser, no quiero estándares, estereotipos ni una meta... Solo fluir entre el susurro de lo que se da y no se da.

A veces, me digo, lo siento, a veces me digo te quiero pero probablemente he caído en la cuenta de que aun puedo jugar a hacer mi mal, cuestionar cosas que daba por hecho y dudas de aquellas que he desecho.

Se puede ser analítica de repente, planeadora y organizada y a la vez, sacar un ser espontaneo, aventurero y arriesgado, con ganas de intentar pero llega el pepe grillo a mi lado a poner cadenita de: puedes dañarte y dañar, si bien la vida es una, no te busques mas problemas de los que puedes tener... sigue sanando, sé tú, no importa que, pero vas primero tu, lo que quieres tu aunque no sea como quisieras, aguanta a tu manera y hazlo como te sientas cómoda. La cadena la dejas o la aflojas o la quitas, pero solo una decide.

Las personas somos como barcos y a veces uno pone o hace que ciertas cosas o personas sean las anclas, olvidando que los barcos deben navegar.... Algo así me dijeron en esta semana, me quede pensando y de la nada sentí el impulso de repasar cosas  de unos 2, 4 y más años atrás, de ver si mis heridas han sanado un poco desde la última vez...  Obviamente, mis ojos aún pueden ponerse turbios, poniéndose en tonos grises, en señal de que se vecina un lluvia, más sin embargo, no es una tormenta intensa, es una pequeña llovizna que no dura más allá de unos cuantos segundos.

Puedo percibir que algunas cosas han cambiado, la forma de expresar interés, cercanía, la forma de responder, de contactarse, de integrarse, la manera de compartir, de hablar, de estar ahí y a la vez no estar ahí... Reafirme que el silencio es un arma mortal, que el callarse las cosas es rematar una herida interna que en un cerrar de ojos puede complicar todo, acabar con ello.... 
Después de mucho tiempo sentí que mi mundo si sigue en mis hombros pero ya no me da tanta pesadez, aun hay cargas que duelen, que lastiman, que me hacen pasar malos días pero tengo que verlos como eso, malos días, no una mala vida, sé que no es la vida perfecta, y hay muchas cosas inconclusas, pendientes, cargas, deseos y ganas de vivir cosas, de sentir, de absorberme en ellas de buena forma pero, aún cuesta... y sin embargo, no debo enredarme en mi estrés ni ansiedad, no dejar que me conquisten por amigas de la depresión suelen ser en mí, y el perderme de nuevo, me da miedo.

No quiero pretender que se esta bien, no quiero pretender que quiero girar las cosas 360° pero tampoco puedo decir que es tiempo para escuchar un: "Te lo dije", no de nuevo.



Algunas veces... solo quiero saber la respuesta a cosas, algunas veces solo quiero que lleguen, algunas otras solo me digo no quiero conocer más. Yo soy mi freno, yo soy mi ancla, mi piloto, mi capitana, mi enemiga y mi amiga...

El cuestionarme el ¿por qué él no quiere intentar las cosas con mayor definición, mientras por otro lado veo que hay quienes tienen mayor apertura y no tienen miedo a aventurarse aunque no se llegue a nada?,  ¿es raro?, digo, en mi perspectiva, no esta bien a veces sucumbir a ideas que pueden alterar más de un mundo solo por el deseo, por el capricho o la curiosidad.

Dicen en mi exterior que no eres mi final, mientras una pequeña vocecita de mí también lo cree y grita sutilmente un ya sal de ahí, y sin embargo, todos las demás la callan,  me llegan imágenes, recuerdos, sentires, emociones... Poderoso es el cariño al final del día.

Sé que es raro ver que no se alinean los planetas a estas alturas, que no buscamos definir nada ni damos señales de formalizar algo, que reciba un no de tu parte ante diversas ideas y aun así no fuerce a nada o no ínsita, o solo no le doy ya la importancia de antes...Comprendo el que la gente no comprenda eso, que chistoso, por primera vez se que es diferente esto y aquello, aunque en circunstancias no tanta es la brecha pero  a veces uno debe volver a su reflejo, ver quien es, que no es, que ha pasado, que ha dejado, que ha avanzado... recordar de todo un poco y soltar, abrazar, llorar hacer de todo pero al final... continuar.


I don´t love you but i do... aunque se que sano lentísimo y aunque parece que no se nota del todo, porque a veces regreso a rebobinar todo, no puedo fingir que no importa todo a la vez,  se bien que me pierdo mucho interna y externamente al nublarme pero he aprendido de mis memorias que pese a crear agüita en mis ojos, y pese a que todos siempre andan dando sus opiniones y sin decirlas sus expresiones las dan, no les hago del caso porque al final es mi vida, ellos son espectadores...

Seré tonta por seguir ahí, en lo que fue nuestra "relación", una vez lo compare a un árbol, los 2 fuimos la semilla y poco a poco con lo que se daba aportamos para que fuera creciendo para que empezara a fortalecerse, a dar flores, frutos, que se pusiera bello, que fuera especial pero dejamos por mucho tiempo, que se marchitarán sus hojas, las flores, se pudrieran los frutos y se enfermara desde la raíz, pero aunque nos apartamos nunca sacamos las semillas y poco a poco, nos acercamos, le seguimos regando, cuidando de alguna forma y aunque a veces es juntos u otras por separado, sin mencionarlo o expresarlo de alguna forma, tratamos de que no se pierda, puede que no hablemos de ello ni de otras cosas series que deberíamos como el resto de la sociedad pero sé que de alguna forma encontré a alguien único con quien quiero compartir mucho y aunque hay trabas o se presenten obstáculos, y los demás sientan que es terquedad más que otra cosa, tal vez tengamos final juntos, tal vez solo seremos un puente, o tal vez nunca avancemos a nada, pero sea lo que sea, si es contigo esta bien y sino, estaremos bien... Sonreiré por ti aunque no sea conmigo tu historia.